Los repartidores de Deliveroo de todo el mundo se unen para reclamar sus derechos a través de la campaña #Rights4Riders (derechos para los repartidores).
Los beneficios de Deliveroo se dispararon durante la pandemia gracias al esfuerzo de sus incansables repartidores. Ahora Deliveroo se dispone a hacer caja lanzando una multimillonaria oferta pública de acciones en la Bolsa de Londres, sin importarle que sus repartidores sigan careciendo de los derechos más básicos.
Los repartidores y repartidoras están sumidos en problemas: salarios ínfimos, contratos como falsos autónomos, desactivaciones injustas, condiciones laborales peligrosas y falta de protección social.
No solo están en riesgo las vidas y el sustento de los repartidores de Deliveroo, también sus inversores enfrentarán cada vez más riesgos legales, de reputación y financieros si Deliveroo no cambia su modelo de negocio depredador.
ENVÍEN UNA CARTA AL CEO DE DELIVEROO, WILL SHU, Y COMPARTAN ESTA PÁGINA
Digánle a Deliveroo que ya es hora de que reparta derechos a sus repartidores #Rights4Riders
A/A: Will Shu, consejero delegado de Deliveroo
Cc: Financial Conduct Authority, Reino Unido
Le escribo para expresarle mi consternación por su intento de extraer beneficios de los sacrificios de sus repartidores.
Los beneficios de Deliveroo se han disparado durante la pandemia. Ahora usted y los inversores iniciales de Deliveroo pretenden embolsarse miles de millones con una oferta pública inicial en la Bolsa de Londres, mientras los repartidores que llevan comida a nuestras ciudades luchan por llevar qué comer a sus propias familias.
Deliveroo tiene una enorme deuda con sus repartidores, que se han visto obligados a trabajar sin los equipos de seguridad adecuados, que no tienen derecho a baja por enfermedad y que cobran sueldos de miseria. Muchos de ellos sufren accidentes y resultan gravemente heridos o mueren mientras trabajan, puesto que se les presiona constantemente para que repartan más rápido o durante más tiempo, arriesgando su seguridad por miedo a que les desactiven y a quedarse sin empleo.
“A pesar de los intentos de Deliveroo y otras empresas de la economía de las microtareas de clasificar erróneamente a los repartidores, cada vez son más los tribunales –entre ellos, los Tribunales Supremos de Reino Unido y Francia– que están reconociendo la existencia de una relación laboral directa.
Y los inversores están viendo con cada vez más claridad los riesgos legales, de reputación y financieros que conllevan los modelos de negocio depredadores de estas plataformas de microtareas.
JustEat, una de sus principales competidoras, ha aceptado dejar de considerar a sus repartidores como falsos autónomos independientes. Es hora de que Deliveroo asuma su responsabilidad y revierta la política de tratar a los repartidores como trabajadores de segunda clase.
Es hora de que Deliveroo deje de considerar a sus repartidores y repartidoras falsos autónomos, de pagar salarios de miseria, de comprometer la seguridad de sus repartidores, de despedirlos injustamente y de ignorar sus derechos laborales fundamentales.
P.D.: Envío una copia de esta carta a la autoridad responsable de la conducta financiera en el Reino Unido (Financial Conduct Authority). Creemos que necesitan saber esto.
Según una encuesta mundial sobre protestas laborales, Deliveroo es la plataforma con más malestar laboral del mundo. Los inversores asumirán cada vez más riesgos de carácter legal, de reputación y financieros, a menos que Deliveroo solucione los siguientes problemas críticos.
Los tribunales holandeses y españoles dictaminaron que Deliveroo clasificó a sus trabajadores como falsos autónomos para evitar la responsabilidad de tener que concederles vacaciones, licencias por enfermedad remuneradas y otros derechos laborales. Deliveroo se aprovecha de las carencias de las legislaciones laborales, que hacen recaer en los trabajadores y trabajadoras precarios la responsabilidad de demostrar que no son autónomos independientes. Los repartidores de otros países también están llevando a Deliveroo a los tribunales por esta práctica y se esperan más sentencias al respecto.
Solución: Dejar de clasificar a los repartidores como falsos autónomos
Deliveroo presume de apoyar a organizaciones benéficas que luchan contra el hambre, pero muchos de sus propios repartidores sufren precariedad alimentaria y de vivienda. En Australia, los trabajadores han llevado a Deliveroo a los tribunales por un supuesto robo de salarios. Deliveroo anunció su intención de duplicar su fuerza laboral durante la pandemia, pero los repartidores lo calificaron de “iniciativa llena de cinismo”, que sólo pretende presentar una imagen positiva de una empresa en crecimiento antes de su salida a Bolsa. Para los repartidores, esta oleada de contrataciones se traduce en menos trabajo, tarifas más bajas y mayores retrasos cuando solicitan soporte. Los repartidores en Dublín organizaron una huelga en enero contra la “drástica reducción” de sus tarifas.
Solución: Tarifas justas, incluidas tarifas mínimas y el pago por interrupciones y tiempos de espera
A pesar de ser aplaudidos como trabajadores y trabajadoras esenciales por su papel en la distribución de bienes esenciales durante la pandemia, los repartidores viven con el miedo a que les despidan arbitrariamente a través de desactivaciones contra las que no tienen posibilidad de apelación.
Solución: Establecer un proceso justo para recurrir las desactivaciones.
Los repartidores enviaron un llamado urgente al consejero delegado de Deliveroo, Will Shu, ante la falta de protección durante la pandemia. Recientemente se han producido numerosas muertes de repartidores de Deliveroo, como un padre de familia de 47 años, en Italia, un repartidor de 48 años originario de Venezuela, médico de profesión, en Madrid o un estudiante internacional de 28 años, en Dublín. El modelo de trabajo a destajo de las plataformas de microtareas y los salarios ínfimos ponen en peligro la seguridad de los repartidores, porque les obligan constantemente a ir más rápido y a trabajar más horas.
Cristian Santabarbara, repartidor de Deliveroo y miembro del sindicato IWGB, afirmó recientemente: “Will Shu podría ganar 350 millones de libras esterlinas con la salida a Bolsa de Deliveroo, pero sigue sin molestarse en garantizar nuestros derechos más básicos, ni siquiera que podamos acceder a los baños de los restaurantes. Es cobarde tratar a los trabajadores de primera línea como algo desechable, sobre todo después de que hemos repartido alimentos a la gente y ayudado a proteger a las personas más vulnerables en estos tiempos sin precedentes”.
Un tribunal italiano determinó que el algoritmo de Deliveroo discrimina a los repartidores que faltan al trabajo por enfermedad, por emergencias y por otros motivos de ausencia legalmente protegidos.
Deliveroo ignora los llamamientos que se le han hecho para que reconozca a los sindicatos de los repartidores. En cambio, gasta enormes sumas para obstaculizar su derecho a negociar colectivamente, a pesar de que el derecho a formar un sindicato es uno de los pilares de los derechos humanos internacionales. Amazon, notoriamente antisindical, fue el principal inversor en la anterior ronda de financiación de Deliveroo, lo que plantea serias dudas sobre el futuro rumbo de la empresa. Amazon acaba de ser multada con más de 60 millones de dólares por robo de propinas y 20 000 de sus trabajadores y trabajadoras en los Estados Unidos contrajeron COVID19 por trabajar en condiciones que fueron criticadas por inseguras.
Solución: Reconocimiento del derecho a formar un sindicato y a la negociación colectiva
Will Shu, Amazon y los inversores iniciales de capital riesgo de Deliveroo pueden ganar miles de millones con la salida a Bolsa de Deliveroo.
A pesar de realizar todo el trabajo, los repartidores no van a recibir prácticamente nada; al contrario, siguen sin concedérseles sus derechos básicos y al parecer las condiciones laborales son cada vez peores.
110 000 repartidores = casi nada
Invertir en un modelo de negocio insostenible permite a los inversores iniciales hacer caja, pero encadena el dinero a riesgos crecientes y al malestar de los repartidores con Deliveroo, la empresa de plataforma contra la que más protestas se convocan.
Will Shu (7 % de las acciones) = 280 millones de dólares a 4000 millones de dólares <–> 910 millones de dólares a 13 000 millones de dólares
Amazon (16 % de las acciones) = 640 millones de dólares a 4000 millones de dólares <–> 2080 millones de dólares a 13 000 millones de dólares
110 000 repartidores = casi nada
Dígannos lo que piensan poniéndose en contacto con nosotros. Estamos deseando conectar con compañeros/as repartidores, clientes, restauradores, inversores y periodistas.
Nota: Al contactarnos, usted acepta recibir mensajes vía correo electrónico sobre la campaña Rights 4 Riders y sobre oportunidades en las que podrá participar. Podrá darse de baja de la lista de correos en cualquier momento. Su dirección de correo no será utilizada para otros fines. Si necesita más información sobre cómo utiliza la ITF sus datos personales, lea nuestra Política de Privacidad.